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Tanguy de Lamotte, navegante de vuelta al mundo y ex "guerrero antiplástico" de Google, encabezará la revolución de los barcos eléctricos en EE.UU.

Tras lanzar el "Tesla Model S" de los barcos, el fabricante sueco de embarcaciones eléctricas Candela aspira a convertirse en la marca número uno de barcos eléctricos en Estados Unidos. El conocido navegante, activista medioambiental y empresario de la sostenibilidad Tanguy de Lamotte dirigirá la división estadounidense de Candela.

El revolucionario y ultraeficiente foiling deportivo Candela C-7 de Candela lleva dos años liderando las ventas de embarcaciones eléctricas en Europa gracias a una combinación inigualable de velocidad, autonomía y silencio. Tras lanzar con éxito hace tres semanas el crucero diurno de nueva generación Candela C-8, la empresa sueca se centra ahora en irrumpir en el sector de las lanchas motoras de Estados Unidos, el mayor mercado mundial de embarcaciones.

Al frente de las operaciones en Estados Unidos estará Tanguy de Lamotte, a quien no le son ajenos los retos inspiradores.

Famoso en el circuito de regatas, de Lamotte tiene varios títulos en su haber, entre ellos dos victorias en la prestigiosa regata Fastnet. Pero quizá sea más conocido por el público por haber participado en algunas de las regatas de vela de larga distancia más atroces del mundo. Arquitecto naval de formación, diseñó y construyó sus propios barcos y compitió dos veces en la regata Mini Transat a través del Atlántico. En 2012, de Lamotte participó en la infame regata alrededor del mundo Vendée Globe 2012, conocida como el "Monte Everest de los mares"

Durante la circunnavegación en solitario sin escalas, que le llevó 98 días, Tanguy de Lamotte durmió en turnos de hora y media mientras se enfrentaba a tormentas, hielo y numerosos problemas técnicos iniciales que le valieron el apodo de "Tangyver".

Tanguy de Lamotte

Activista de toda la vida, que aprovechó la publicidad de la navegación para recaudar fondos para niños con afecciones cardíacas, Tanguy es un verdadero partidario del cambio hacia transportes sostenibles. Tras navegar a Hawái en 2018, se sorprendió al descubrir que el océano estaba plagado de plásticos, el llamado Gran Parche de Basura del Pacífico.

- Encontramos basura de plástico -bolsas, vasos, gorras de baloncesto, de todo- en cada metro que navegamos, durante todo el viaje. Esto nos abrió los ojos, dice de Lamotte.

Esta experiencia le llevó a unirse a Google en 2019, donde, apodado "El guerrero del plástico", encabezó los esfuerzos del gigante de las búsquedas para reducir los residuos plásticos entre los 200 000 trabajadores.

- Lo primero que hicimos fue prohibir las botellas de plástico de un solo uso. En aquel momento, en Google se consumían 300 000 botellas de agua al día. Al fin y al cabo, luchar contra los residuos plásticos es lo mismo que luchar contra los combustibles fósiles: realmente soy un soldado en esa guerra, dice de Lamotte.

Con sede en San Francisco, Tanguy de Lamotte es la persona ideal para crear la división estadounidense de la empresa tecnológica sueca, centrada en la promoción de las revolucionarias embarcaciones de recreo, así como de las embarcaciones comerciales de pasajeros de Candela, el P-30 y el P-12.

- Quería combinar mi experiencia en navegación y en sostenibilidad: Candela tiene ambas cosas. Aúna la tecnología de las regatas y la sostenibilidad, para que todo el mundo pueda disfrutar de una mejor experiencia en el mar. Como soy ingeniero, me encanta la tecnología que permite que el barco vuele tan bien. Es como un paseo en alfombra mágica. Va a cambiar las reglas del juego para los navegantes de recreo y para la comodidad del transporte marítimo público. Un Candela es simplemente un barco mejor, dice de Lamotte.

- Estamos muy contentos de tener a Tanguy a bordo. Es un auténtico defensor del transporte marítimo sostenible", afirma Gustav Hasselskog, fundador y CEO de Candela.

Candela C-8

Mientras que los coches eléctricos ya han conquistado las carreteras, las lanchas eléctricas han sido hasta ahora lentas y carentes de autonomía. La razón es que los cascos tradicionales de las lanchas rápidas son difíciles de convertir a la propulsión eléctrica, incluso los que planean con facilidad. La fricción del agua es tan grande que incluso las mejores baterías de iones de litio se agotan tras media hora de navegación a alta velocidad.

Los hidrodeslizadores eléctricos de Candela vuelan sobre el agua a gran velocidad sin que las olas ni el viento les afecten. Fabricadas en Suecia con los más altos estándares de calidad, son las primeras embarcaciones totalmente eléctricas que rivalizan en autonomía y velocidad con sus competidoras de gasolina.

En San Francisco se podrán realizar pruebas con el Candela C-7. Para concertar una cita, póngase en contacto con Mikael Mahlberg, Director de Comunicación, en mikael.mahlberg@candela.com.